Trágicamente, miles de niños se están quedando atrás por la crisis global del ébola – están solos en el mundo, pero pueden contar con nuestra ayuda. Moses es uno de estos niños.
La historia de Moses
El pequeño Moses, de tan sólo 10 años de edad, fue encontrado, apenas con vida, en la cuneta de una carretera. Había estado viajando con su familia por la capital de Liberia, cuando sus padres sucumbieron al ébola, dejándolo atrás – huérfano y solo. No solo tenía el corazón destrozado sino que también estaba enfermo debido al brote sin nadie que lo cuidara.
Por miedo al ébola, Moisés fue rechazado siempre que pidió ayuda, e ignorado por todos los que pasaban a su lado. Lejos de casa, no sabía dónde estaba ni cuántos días había estado viviendo en las calles. No habría vivido mucho más tiempo si no hubiera sido por un policía que lo encontró y lo llevó a la Unidad de Tratamiento de ébola en el hospital JFK.
Tristemente, sólo uno de cada cuatro niños infectados durante el brote de ébola ha sobrevivido. Pero Moses lo consiguió.
Moses y Vivian
Durante su recuperación en la Unidad de Tratamiento de Ébola conoció a otra paciente llamada Vivian – una mujer muy generosa y cercana, que fue capaz de conseguir que volviera a sonreír. Vivian también era una superviviente del ébola y también había perdido a algunos familiares. Se hicieron amigos rápidamente. Cuando llegó el momento del alta de Moses, el personal del hospital se había planteado, por desgracia, llevarlo a un orfanato. Pero Moses se negó a ir, y se agarró a la mano de Vivian. No quería soltarse.
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Sonia Khush, directora senior del equipo de Respuesta Humanitaria, entrega un kit de supervivencia a Moses y Vivian
Vivian tampoco quería que se fuera. Decidió acoger a Moses en su casa hasta que se encuentre a algún familiar vivo. A través de los programas de búsqueda y reunificación de niños de Save the Children, las familias se vuelven a unir, aún en medio del caos y la crisis. También les proporcionan a los cuidadores y huéspedes, como Vivian, kits de supervivencia, con alimentos básicos y los suministros necesarios para los niños que han perdido a sus padres.
Hoy, Moses, de la mano de Vivian, continúa con su larga recuperación – tanto física como emocional – de la tragedia del ébola.
El trabajo de Save the Children en el ébola
La crisis del ébola ha alcanzado un momento crítico. Desde que empezó Save the Children en Sierra Leona, Guinea y Liberia ayudando a cientos de miles de personas, proporcionándoles ayuda material, apoyo psicológico y asistencia médica.
Pero queremos aumentar nuestros esfuerzos ya que el número de casos sigue creciendo. Para ello reclamamos la solidaridad social para poder seguir ayudando a los afectados. Colabora con nuestro trabajo en la crisis del ébola.
